Se conocen como “tarot de Marsella” a una familia de mazos que guardan similitudes en la estética e imaginería usada en cada carta, aunque no todos los que suelen recibir dicha denominación son oriundos de dicha ciudad francesa. Esta denominación fue acuñada por Paul Morteau en 1930, al publicar el “Antiguo Tarot de Marsella”.

Se considera este Tarot el más antiguo que establece la estructura actual, su orden, simbolismo y la denominación de sus cartas –especialmente los Arcanos Mayores-. En los Tarots italianos como el Visconti – Sforza las cartas no reciben nombre ni numeración, y variantes como el Minchiate o el Sola – Busca poseen una estructura -97 cartas- e imaginería –los Triunfos no se condicen con los conocidos- alternativa, que demuestran el período de adaptación histórica en el que fue evolucionando hasta alcanzar un patrón determinado.

Si bien los mazos más antiguos que aún se conservan de esta familia datan de aproximadamente 1650, se piensa que existió un antecesor común perdido, del que partían los distintos maestros carteros de la época para realizar sus versiones

La Cary Sheet -o lámina Cary-. ¿El eslabón perdido entre los Tarots de Marsella conocidos y los antiguos mazos italianos?

La Cary Sheet -o lámina Cary-. ¿El eslabón perdido entre los Tarots de Marsella conocidos y los antiguos mazos italianos?

manuales. Sirven a modo de prueba de esta hipótesis la Cary Sheet –lámina de Cary, que recibe su denominación por encontrarse en la colección de la Familia Cary en la Universidad de Yale-, una lámina o plancha sin cortar, con cartas que poseen una estética similar a la que se encuentra en los mazos de Marsella. Esta plancha está fechada en aproximadamente 1500, lo que para muchos es un dato que sirve para avalar la antigüedad histórica del patrón Marsella, paralela a los mazos italianos conocidos. Esta plancha guarda relación con los mazos italianos en cuanto las cartas no reciben nombre ni numeración. Otra pieza histórica la constituyen las cartas del Castillo Sforza: se tratan de un conjunto de cartas, las cuales algunas guardan relación con los mazos de Marsella; especial mención es el 2 de Oros, que es exactamente igual al que encontramos en todas las barajas de esta familia, y está fechado en 1499 –la fecha que figura en la franja que rodea las monedas, usada para exhibir el nombre del artista y el año de publicación-. Si bien estas cartas no constituyen un único mazo, sino que son fragmentos de varios mazos –algunos son exactamente eso, “fragmentos”, no llegan a ser cartas enteras-, el 2 de Oros coincidente con el patrón Marsella podría dar la pauta de que ya en esa época existía la imaginería típica de este patrón. El hecho de que los eslabones más antiguos del Tarot de Marsella se hallen en Italia, lleva a suponer que su origen está en esa región, posiblemente Milán, dado que las imágenes guardan estrecha relación con el Visconti –Sforza. Se cree que pudieron haber emigrado a Francia luego de la invasión de Carlos VIII en 1499. Otra suposición es que tras dicha invasión, llegasen a Italia las cartas que conformarían el estilo Marsella.

"Le Fov" -El Loco-, Tarot de Jean Noblet, circa 1650.

«Le Fov» -El Loco-, Tarot de Jean Noblet, París, circa 1650.

El mazo más antiguo de esta familia pertenece a Jean Noblet –circa 1650, París-. Aquí veremos por primera vez cartas tituladas y numeradas en un orden. Si bien esta época también tendrá otras variantes relacionadas con este patrón, como el Tarot de Vieville

El Loco, Tarot de Jacques Vieville, París, circa 1650.

El Loco, Tarot de Jacques Vieville, París, circa 1650.

–denominado Tarot Belga aunque fuese publicado en París también, por Jacques Vieville-, lo que confirman que pese a las diferencias, hay un patrón que empieza a delimitarse, al menos visualmente. El segundo en importancia lo constituye el de Jean Dodal –circa 1701, Lyon-, el cual ya muestra determinadas diferencias con el de Noblet que indican una evolución en sus detalles –ya sea por la pérdida de algunos, o la distorsión de otros-; contemporáneo a Dodal, hallamos el mazo de Pierre Madénie –circa 1709, Dijon-, el cual ya plantea diferencias más marcadas, que terminan de lustrarse con el mazo de François Chosson –circa 1736, Marsella, aunque es producto de debate la fecha de este mazo-, que años después copiaría Nicolas Conver –circa 1761, Marsella-, el cual se volverá el más popular y la versión más reconocida hasta la actualidad. Luego de 1770 la mayoría de los mazos de esta familia serán derivados del estándar planteado por Madénie – Conver.

El Tarot de MarsellaTdM– presenta históricamente dos subtipos: el perteneciente a Jean Noblet y Jean Dodal, y el de Pierre Madénie y Nicolas Conver, que Thierry Depaulis denomina “TdM I” y “TdM II

Tarot de Jean Dodal, Lyon, circa 1701.

Tarot de Jean Dodal, Lyon, circa 1701.

respectivamente. En la actualidad, el mundialmente conocido y reproducido a mayor escala es el TdM II.

Además de las diferencias visuales que posee el diseño de los dibujos, las mayores divergencias, por citar algunas, son:

  • En LAMOUREUX –Los Enamorados-, Cupido posee los ojos vendados –TdM I-, lo cual no está en el diseño del subtipo TdM II
  • En LA MAISONDIEU –La Torre-, las llamas parecen salir de adentro –TdM I- en lugar de provenir del cielo –TdM II-
  • En LA LUNE –La Luna-, la cara está de frente y parece ser más una luna llena –TdM I-, en lugar de estar de perfil, denotando una luna creciente –TdM II-
  • En LE PENDU –El Colgado-, hay dedos que salen de sus hombros, y tiene la lengua afuera –TdM I-
  • En LE MONDE –El Mundo- el personaje central se ve más andrógino y está vestido con capa –TdM I- en lugar de la banda que cubre su sexo, y su apariencia esencialmente femenina –TdM II-
Le Mat -El Loco-, Nicolas Conver, Marsella, circa 1760.

Le Mat -El Loco-, Nicolas Conver, Marsella, circa 1760.

El TdM se volverá el más reconocido en dicha época, en donde los distintos estudiosos del Tarot e iniciadores de la fase del “Tarot Esóterico”, como Antoine Court de Gebelin, Eliphas Levi y Papus, entre otros, tomarán esta baraja como punto de partida para sus análisis. Puede suponerse que uno de los elementos que contribuyeron a que se popularice fue su accesibilidad para los sectores más populares, a diferencia de los Tarots italianos del S. XV, los cuales eran de uso de familias nobles, debido al alto lujo de detalles y algunos elementos usados, como el pan de oro.

En 1930, Paul Morteau, director de la casa impresora de cartas Grimaud, publicará la edición más conocida del TdM a partir de las planchas originales usadas por Nicolas Conver, con diversas alteraciones en los colores y algunos detalles. Él será quien bautice como “Tarot de Marsella” a este Tarot.

LAS RESTAURACIONES DEL TdM

A finales del siglo XX, habrá un resurgimiento del interés y estudio de este Tarot, que tendrá como meta el estudiar y comparar todos los mazos que históricamente han existido bajo este patrón, con el objeto de recuperar su verdadera composición, colores y detalles, que paulatinamente fueron perdiéndose debido a las impresiones industriales que irían alterando colores y detalles a fin de facilitar el proceso. Este proceso de Restauración, denominado también Reconstitución o Reconstrucción del TdM hará que empiece a popularizarse más entre los adeptos del Tarot, empezando a llamar la atención de aquellos que buscan la esencia “verdadera” del Tarot, la cual consideran perdida o distorsionada en otros tipos de mazos como el Rider- Waite –Smith o el Egipcio.

Le Fol -El Loco-, Kris Hadar, 1996.

Le Fol -El Loco-, Kris Hadar, 1996.

El primero en abrir el juego en el campo de las restauraciones será el francés Kris Hadar. En 1996 dará a conocer su “Verdadero Tarot de Marsella”, la primera restauración que intentará recuperar los antiguos detalles y colores “distorsionados” a partir del mazo de Conver. Amén de algunos detalles pintorescos, como el halo de luz en la cabeza de algunos personajes –como La Papisa-, Hadar establece el origen del Tarot en 1181, como heredero de la cultura Occitana –cultura que tuvo influencia en gran parte del actual territorio francés, que fue perseguida durante la Cruzada Albigense-.

La segunda restauración será la más conocida actualmente, es la realizada por Phillip Camoin y Alejandro Jodorowsky. Phillip Camoin es descendiente de los dueños de la casa impresora de cartas Camoin, quienes fueran los herederos del trabajo de Nicolas Conver y constinuadores de la casa Conver- Camoin. Con la motivación de Jodorowsky, Camoin emprende el trabajo de restauración del mazo de Conver, usando como principal

Le Mat -El Loco-, Jodorowsky-Camoin, 1998.

Le Mat -El Loco-, Jodorowsky-Camoin, 1998.

referencia las planchas originales y los distintos mazos históricos en posesión de distintos museos –incluyendo una misteriosa baraja que Jodorowsky halló en Mexico, que es la referencia a alteraciones que no guardan relación con los mazos históricos. De dicha baraja no hay pruebas de su existencia, salvo la palabra de Jodorowsky y Camoin-. En 1998 se lanzará el “Antiguo Tarot de Marsella”, esta vez sin poder auto-denominarse “verdadero” debido a que Hadar ya lo había registrado así. Al igual que Hadar, esta reconstrucción vendrá acompañada de una teoría del origen del Tarot, el cual Camoin remonta hasta María Magdalena, estableciéndolo como su evangelio perdido. Según él, luego del a crucifixión, ella escaparía a Egipto, en donde sería recibida como representación de la diosa Isis, y en donde esconderá los secretos iniciáticos cristianos originales. Tras varios siglos, serían llevados a Europa, a los territorios franceses, por el monje Cassiano, en donde adoptarán la imaginería y diseño actuales. La Iglesia, siendo consciente de lo que estas cartas representan, la condenarán como “herejía” en lugar de la clásica condena por “hechicería o superstición”, como se condenaban las prácticas adivinatorias en aquella época. Los Triunfos serán una representación de cada siglo de la era cristiana, que terminarán con el resurgimiento de María Magdalena en el mundo.

De esta línea procederán los españoles Daniel Rodés y Encarnación Sanchez, ex discípulos de Camoin, que también traerán al mundo su propia versión de lo que es el “verdadero y antiguo” TdM. Su baraja Lemat-r-Tarot de Marsella Le Mat-, presentará la particularidad de poseer un fondo dorado, en alusión a las antiguas barajas italianas que también poseían dicho estilo –aunque no existan pruebas de que el TdM alguna vez haya poseído dicho detalle de fondo dorado-. Una vez más, esta restauración vendrá acompañada de una posición propia sobre su origen –el del Tarot en general-, estableciendo a la filosofía Cátara como su punto de partida. Los Cátaros tuvieron su mayor influencia en los actuales territorios franceses, coincidentes con la cultura Occitana; denominadas sus creencias como “la herejía Albigense” –Albigenses era otra de las formas de llamarlos- serán fuertemente perseguidos por la Iglesia Católica mediante la Cruzada Albigense. Una de las creencias constituyentes de esta herejía era la concepción de un mundo espiritual, gobernado por Dios; y un mundo terrenal, gobernado por Satán. Para ellos, todas creaciones terrenales –incluida la institución de la Iglesia- eran obra de éste último. Su vía para alcanzar la iluminación era el ascetismo, y proclamaban la reencarnación de las almas en este mundo hasta que pudieran ser capaces de ver a la divinidad y escapar de este reino.

En paralelo a esta vía restauradora con pretensiones de portar la verdad sobre el TdM, se hallarán otras personas que se guiarán sin tantas motivaciones grandilocuentes y marketineras, como el francés Jean Claude Flornoys, que ha restaurado los distintos Tarots históricos de la familia Marsella, como el de Jean Noblet, Jean Dodal y Nicolas Conver, e inclusive los 22 Arcanos Mayores pertenecientes al mazo de Jacques Vieville. A diferencia de las reconstrucciones anteriores, el trabajo de Flornoy no vendrá teñido o avalado por una teoría específica sobre su origen, ni aires de verdad re-descubierta, sino con el deseo de recuperar piezas históricas. De similar vertiente, hallamos al argentino Pablo Robledo, que ha realizado distintas re-ediciones del TdM II, junto con el de Dodal y los Arcanos Mayores del Tarot de Besançon. La labor de estos dos artesanos restauradores aportará una cuota invaluable a la recuperación del Tarot como objeto de estudio histórico, guiados por el amor al arte y su difusión, sin la pretensión de constituirse en maestros iniciados con una verdad única.

 Para saber más de las re-ediciones:

Jean Claude Flornoy: http://www.tarot-history.com/index.html

Pablo Robledo: https://thetarotofmarseilles.blogspot.com.ar/

Phillip Camoin: http://es.camoin.com/tarot/-Inicio-es-.html

Daniel Rodés y Encarnación Sanchez: http://www.kharmos.com/lemat-tarot/

Kris Hadar: http://www.krishadar.com/

Para ver los distintos mazos históricos del TdM II 

Tarot of Marseilles Heritage: http://tarot-de-marseille-heritage.com/english/index.html

Próximamente, enlaces a los albumes en el FB de Tarot Cotidiano de los distintos Tarots de Marsella